La presión arterial alta no controlada puede generar discapacidad, una mala calidad de vida o incluso un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular fatal. En este contexto, un tensiómetro alerta sobre cualquier anomalía de forma que se puede acudir al médico para su control y diagnóstico antes de que se agrave la situación.
Este dispositivo médico a través del cual se puede medir la presión arterial con facilidad, consiste en un brazalete que se hincha mediante una bomba manual o de manera automática. Al mismo tiempo, una especie de reloj digital o analógico da los valores máximos y mínimos de la presión sanguínea.
Es importante saber que la presión arterial debe estar entre los 120/20 mmHg y la 90/60 mmHg en condiciones normales. Por tanto, cualquier variación sobre estos valores es una señal de alerta, sobre todo si superan las cifras máximas, que es cuando se vuelve más peligroso.
Para poder realizar buenas mediciones es importante comprar un tensiómetro de calidad. En el mercado hay muchos, pero una buena forma de hacer la comparativa es visitar Detensiometros.es y elegir el modelo que mejor se adapte a lo que se está buscando. Los hay digitales, que son los que más están creciendo en ventas, y los manuales o tradicionales. Ambos cumplen perfectamente con su cometido.
Para qué sirve un tensiómetro
Cuando se usa el tensiómetro se puede detectar hipotensión, o tensión arterial baja, es decir, las partes más importantes del cuerpo no son capaces de recibir la suficiente sangre. La persona se sentirá muy cansada, con sueño y en el peor de los casos podría desmayarse o perder la consciencia.
Pero quizás la función más importante es que también ayuda a detectar la hipertensión, o tensión arterial alta, la que más peligro supone para la salud. En este sentido, se dice que una persona tiene hipertensión cuando la tensión es superior a 130/80 mmHG. Normalmente las personas con más riesgo de padecerla son las personas con obesidad, que llevan una dieta con alto consumo de sal, beben alcohol, fuman o sufren de estrés. También hay otras patologías como la insuficiencia renal que causa este síntoma tan molesto y peligroso.
Con el uso del tensiómetro también se puede conocer si la persona sufre de insuficiencia cardiaca. Esto se traduce en que el corazón no bombea la sangre necesaria. En este caso se detectarían anomalías entre los valores máximos y mínimos o valores cambiantes a lo largo del día o de la semana.
Sea como fuere, tener este aparato en casa puede ahorrar muchas visitas a la farmacia o al médico, y lo más importante, alertar de posibles enfermedades antes de que aparezcan.