Tu educación como enfermera no debería terminar una vez que te gradúas. De hecho, ese solo debería ser el inicio de un camino que dure toda tu vida laboral. En principio no suena muy apetecible y más después de haber estudiado durante años y ahora lo que quieres es recoger los frutos de ese trabajo. Pero la realidad es que la formación continua es vital para cualquier profesional sanitario.
En un mundo que evoluciona tan rápido, tienes que estar al día de los avances más importantes para prestar la mejor atención a tus pacientes. Pero la realidad es que la formación continua es vital para cualquier profesional sanitario.
En un mundo que evoluciona tan rápido, tienes que estar al día de los avances más importantes para prestar la mejor atención a tus pacientes.
Además, seguir formándote te permitirá progresar en tu carrera laboral por lo que se hace fundamental los cursos de enfermería como parte de la formación continua en el proceso de aprendizaje que comienza al finalizar los estudios obligatorios para ejercer una profesión, en este caso la enfermería.
Pero antes de continuar, permíteme una aclaración: aunque podemos considerar como formación continua cualquier actividad de aprendizaje, como leer manuales y revistas científicas, en este artículo nos referimos a la Formación Continuada acreditada.
Esta es la que te proporcionará créditos CFC con reconocimiento oficial, que puedes convalidar en oposiciones, bolsas de trabajo o procesos de promoción interna. Pues bien destacamos si lo que queremos son créditos y sobre todo prestigio DAE formación, una Institución que lidera la producción científica en habla hispana en materia enfermera desde hace años. Al realizar un curso de enfermería online CFC de DAE formación, estarás realizando un curso debidamente acreditado y de gran calidad científica, optando a la mejor formación CFC (Comisión de Formación Continuada).
Según el Ministerio de Sanidad, esta modalidad de formación no solo es recomendable, sino “una obligación para los profesionales sanitarios”.
Principales motivos más importantes por los que debes seguir formándote una vez graduada:
1. Adquieres nuevos conocimientos
¿Quieres especializarte en una nueva área? ¿Te han destinado a un nuevo puesto y necesitas aprender conceptos específicos?
Los cursos de formación continua son una excelente manera de lograrlo, ya que te permiten ampliar lo que te enseñaron en la carrera.
Y es que en salud nunca se sabe suficiente. Cualquier conocimiento que obtengas supondrá una mejora en tu labor como enfermera.
2. Prestas una mejor atención a los pacientes
Las enfermeras mejor formadas son capaces de ofrecer un cuidado de mayor calidad a los enfermos que tiene a su cargo.
3. Mejoras tus condiciones laborales
Mediante los cursos de formación continua tendrás más posibilidades de promocionar en tu trabajo.
Se te abrirán puertas que antes ni imaginabas: acceder a puestos mejor remunerados, trabajar en cargos de mayor responsabilidad, elegir la especialidad que te apasione…
4. Consigues más puntos en bolsas de trabajo y oposiciones
¿Estás pensando en presentarte a unas oposiciones?
Entonces sabrás que es fundamental tener los máximos méritos posibles, al margen de la nota que saques en el examen.
Y ahí es donde entra la formación. En muchos concursos y bolsas de trabajos este aspecto se valora muy positivamente.
Lógicamente, un máster en Enfermería siempre te dará más ventaja, pero en muchos procesos de selección también reconocen como mérito los cursos con acreditación CFC.
5. Evitas quedarte desactualizada
Los protocolos, técnicas y descubrimientos científicos están en constante evolución.
Por eso, puede que lo que aprendiste hace unos años ya se haya quedado obsoleto.
Si no estás al tanto de los últimos avances del sector sanitario estarás en desventaja con otros enfermeros que compitan por tu puesto de trabajo, ya que este es un aspecto muy valorado por los jefes de personal y departamentos de RRHH.
Y por supuesto, también se verá mermada tu calidad asistencial a los pacientes.
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