Micrófonos profesionales

 Hoy en día tanto si te dedicas al teletrabajo en le cuál resulta fundamental poder establecer una comunicación clara, fluida y confortable o si grabas contenido audiovisual (vídeos, podcast, streaming…) con relativa periodicidad tarde o temprano vas a tener que plantearte comprar un micrófono en condiciones.

Dado que gran parte de nuestra comunicación, con compañeros de trabajo, profesores, amigos y familiares, ahora se lleva a cabo desde casa a través de ordenadores, tabletas o teléfonos inteligentes, la calidad de audio se ha convertido en una cuestión vital.  

La calidad irregular del micrófono o la respuesta pobre de los altavoces eran circunstancias, hasta hace pocos días, tolerables por muchos. Sin embargo, no sucedía lo mismo con la calidad de la imagen. Ahora, las tornas han cambiado. Pero, ¿QUÉ TIENES QUE TENER EN CUENTA A LA HORA DE COMPRAR UN MICRÓFONO PROFESIONAL?  

Todo va a depender de las necesidades reales de cada uno según necesitéis calidad de sonido en entornos de escritorio (Windows, MacOS, Linux), por ser el entorno habitual de la mayoría de podcasters, youtubers y streamers.

Lo más importante primero es saber a ciencia cierta que ese micrófono que queremos comprar es compatible de forma directa con dispositivos de electrónica de consumo.

Un problema muy habitual es que la gente compra un micrófono chollo por Internet, para darse cuenta cuando le llega a casa y lo conecta que el micrófono no funciona.

Esto pasa porque no todos los micrófonos cuentan con una etapa que permita directamente convertir el sonido análogico en digital, precisando por tanto de un dispositivo intermedio (una mesa de mezclas, por ejemplo) que lo haga para poder usarse.

Y con que tenga USB no basta. Antes de elegir lo que queremos hay que seguir unas pautas.

- Anota bien qué o quién quieres captar.

Este es el consejo más importante que debes atender. En primer lugar debes conocer el concepto de fuente sonora. Simplificando, consideramos como fuente sonora a cualquier elemento que genere sonidos que son susceptibles a ser capturados, tales como nuestra voz.

-Verifica la sensibilidad y el SPL.

Sensibilidad y SPL son dos caras de una misma moneda que nos habla de los decibelios o “volumen” que puede captar nuestro micrófono. Simplificando mucho sensibilidad se refiere a cuán bajo puede escuchar el micrófono.

- Observa bien el tipo de micrófono.

Un micrófono básicamente captura una fuente acústica y la convierte en electricidad. Existen varias formas de lograrlo, y esas diferentes formas han creado distintos tipos de micrófono.

- Busca la calidad que usarás.

- Tras decidirte, haz pruebas.

Pero aunque en teoría podamos recomendar de forma cercana al acierto qué hacer en una situación, cada entorno tiene unas cualidades diferentes.